El estrés es la percepción de amenaza, daño o peligro de un evento externo o interno, que sobrepasa nuestros recursos y perturba nuestro bienestar.

Es importante el manejo del estrés en el trabajo para mejorar el estado de salud físico y psicológico de los trabajadores y disminuir los riesgos laborales y costes sociales.

Las causas más habituales del estrés laboral, es decir, los factores de riesgo, son:

  • Condiciones ambientales y diseño del puesto de trabajo: seguridad en el trabajo, ambiente físico, nivel de ruido y vibraciones, iluminación, clima físico (temperatura, humedad, viento y radiación), higiene (limpieza, ventilación), espacio disponible…
  • Organización laboral: niveles jerárquicos, poco apoyo y refuerzo institucional, demanda laboral, inseguridad laboral, tareas fragmentadas y repetitivas, falta de promoción, escasez en la empresa, re-estructuración organizacional, cambio de propietarios, nuevas tecnologías.
  • Puesto de trabajo: baja remuneración, rol del trabajador ambiguo o conflicto de rol, falta de formación, densidad social, competitividad, autoridad y responsabilidad, trabajo a turnos, sexismo.
  • Relaciones interpersonales en el trabajo: malas relaciones (compañeros, superiores, profesionales), bajo apoyo social (pareja, familiares, vecinos, amigos), rivalidades políticas, celos profesionales.
  • Perfil del trabajador: muy alto entusiasmo inicial, ser empleado joven, no tener hijos, ser mujer, personalidad (existe la personalidad resistente al estrés: compromiso, control y reto), implicación e identificación personal, creencias personales, autoestima.
  • Nivel de ocio: cuanto menos ocio peor.

Existe un perfil de las personas con riesgo de estrés. Suelen ser personas con pensamientos idealistas, optimistas e ingenuos. Suelen tener personalidad débil, baja tolerancia al estrés…

El estrés suele manifestarse por un estado de agotamiento emocional, mental y físico, que incluye sentimientos de impotencia e inutilidad, sensaciones de sentirse atrapado, falta de entusiasmo y baja autoestima. Pudiendo resumirse en agotamiento, desmoralización y pérdida de motivación. Es importante estar preparado!

Los síntomas del estrés suelen ser:

  • Emocionales: depresión, desesperanza, irritación, apatía, pesimismo, desilusión, falta de tolerancia, acusaciones a los clientes…
  • Cognitivos: pérdida de valores, desaparición de expectativas, modificación del auto-concepto, perdida de creatividad, distracción, cinismo, criticismo generalizado…
  • Conductuales: evitación de responsabilidades, absentismo, conductas inadaptadas, desorganización, evitación de decisiones, aumento del uso de cafeína, alcohol, tabaco…
  • Sociales: evitación de contactos, conflictos interpersonales, malhumor, aislamiento.

Normalmente, las personas en un esfuerzo por adaptarse y responder eficazmente a las demandas y presiones laborales, se esfuerzan en exceso y de manera prolongada en el tiempo, además se sobreexigen, aumentando la tensión y la frustración por los resultados no esperados. Todo esto origina el riesgo de enfermar física y/o mentalmente.

El afrontamiento son los esfuerzos que se hacen para controlar, reducir o aprender a tolerar las amenazas que conducen al estrés. Existen dos categorías principales de afrontamiento:

  • Afrontamiento centrado en las emociones: hace referencia a modificar el modo de vivir la situación, incluso cuando no se pueda hacer nada para cambiar el contexto. En este tipo de afrontamiento se incluyen la evitación, la minimización, el distanciamiento, la atención selectiva, las comparaciones positivas y la extracción de valores positivos.
  • Afrontamiento centrado en el problema: está dirigido al problema. Se dirige a la demanda, a la tarea, trata de solucionar el problema definiendolo y buscando soluciones alternativas teniendo en cuenta los pro y los contra, es decir, resolución del problema. También incluye variación del nivel de aspiración de la persona, desarrollo de nuevas conductas…

Las estrategias básicas de manejo del estrés son:

  • Relajación: fisica y mental.
  • Ocio: ejercicio físico (descarga adrenalina, rutinario), fortalecer redes de apoyo social.
  • Reestructuración cognitiva: entrenamiento en técnicas de afrontamiento orientadas a resolución de problemas, autoevaluación de los profesionales, uso eficaz del tiempo.
  • Ensayo de habilidades: desarrollo de habilidades de comunicación, habilidades sociales y asertividad, expresión de la ira, manejo de los sentimientos de culpa…

Las técnicas serían :

  1. Técnicas de relajación:
    1. Uso de vocales.
    2. Técnica respiratoria.
    3. Visuales.
  2. Técnicas de afrontamiento (que pienso, que siento y que hago):
    1. Evaluación cognitiva (detectar y evaluar características de la persona).
    2. Dificultades cotidianas (observación de la realidad).
    3. Afrontamiento (hacer cambios de pensamiento).
  3. Uso del pensamiento racional:
    1. Generalización.
    2. Interpretación de pensamientos: prestar oído a todo, no creer lo que dicen.
    3. Polarización: no es verdad que todo sea negro o blanco.
    4. Visión catastrofista: buscar alternativas.
    5. Falacia de control: todo ha sido mi culpa.
    6. Falacia de cambio: las cosas no salen bien porque no se dijeron en su momento, cada uno trae su felicidad.
    7. Interferencia arbitraria: a partir de un detalle se extrae una conclusión / hacer un análisis.
  4. Autocontrol de pensamientos y emociones:
    1. Técnica respiratoria.
    2. Técnica de relación.
    3. Alejarse de la situación de conflicto.
    4. Pensamiento positivo.
    5. Aprender la paciencia.
    6. Plantearse metas a corto plazo.
    7. Juego de roles.
    8. Detención del pensamiento.
  5. Técnicas de comunicación asertiva: expresión de pensamiento, sentimiento y creencias de forma directa y apropiada sin violar los derechos de los demás.
    1. Mensajes YO.
    2. Disco rayado.
    3. Aplazamiento.
    4. Ignorar.
    5. Aceptación positiva.
  6. Manejo de conflictos (negociación). Comunicación que influye en el comportamiento de los demás donde ambos llegan a un acuerdo ganar-ganar.

En resumen, lo que tenemos que buscar es mejorar las condiciones ambientales, rediseñar el puesto de trabajo, enriquecer el puesto de trabajo (incorporar la autonomía, retroalimentación, variedad en la tarea y habilidades), redefinir roles, reorganización de horarios, diseño de planes de carrera, desarrollo de equipos de trabajo, uso de técnicas y estilos de dirección participativa, mejora en la comunicación, buen clima laboral, evitar sobrecargas, fomentar la socialización e implantar y gestionar nuevas tecnologías.